DÍA DE LAS MADRES

DÍA ESPECIAL DE LAS MADRES

Manuel José Montero Vizcaino

Bendito el día en que el divino hacedor depositó en el vientre de la mujer la bondad de engendrar la vida y de alojar por hermosos nueve meses la aurora de la existencia.

Bendito el día en que Dios, en su infinita sabiduría, le dio el don de guiar y orientar al ser nacido de sus entrañas, de llenarlo de ternura y amor como solo ella, en su innata dulzura, le puede ofrecer.

Hoy es una fecha especial para rodear a todas las madres de amor y comprensión. Es un espacio propicio para disfrutar su presencia o evocar su grandeza en su ausencia material; es un instante para valorar lo que significan e influyen en la construcción de nuestras vidas, por ello, quiero rendir un homenaje sincero a todas, especialmente a mi madre que desde el cielo ilumina mi camino y quien, además de haber engendrado mi vida, fue guía, orientadora y forjadora de lo que soy. Fue una mujer que con sacrificio, amor, dedicación, tesón y sapiencia me hizo ser una persona de bien, llena de valores y respetuosa del orden social.

Quiero también homenajear a Ana Cecilia en esta fecha especial, otra mujer que transformó mi vida, que con su equilibrio emocional ha sabido moldear mis sentimientos. La que felizmente me dio cuatro hijos hermosos, que ha sabido comprenderme desde mi realidad y ha contribuido a perfeccionarme como ser, que ha sido mi complemento y ha contribuido a forjar mi proyecto de vida.

También hago extensiva este homenaje a mi hija Naybis, tierna, amorosa, abnegada, organizada y con una capacidad de superación admirable, la que para mí felicidad me dio un hermoso nieto. De igual manera, a la nueva integrante de mi grupo familiar, Geraldine, que me ha regalado también una hermosa nieta.

No podría dejar de lado en este día especial a Naida mi hermana, un ejemplo digno de seguir por su lucha ardua como profesional y como madre en la construcción y orientación de su hogar. Ha sabido dar a sus hijos la crianza y el legado de las buenas costumbres.

Para esas mujeres que dieron y siguen dando todo para que hoy estemos disfrutando este mundo, muchas bendiciones. Más allá de un día de felicidad y alegría, se merecen el respeto y admiración de hoy y siempre.

¡FELIZ DÍA! DIOS LAS BENDIGA.